miércoles, 24 de junio de 2009

Francia: Representantes 3

Héctor Guimard
Arquitecto, basado en la obra de Víctor Horta y en las teorías de Eugene Emmanuel Viollet-le-Duc, considerado uno de los principales en este país. Caracterizado por una línea sinuosa usada en materiales como la cerámica y el vidrio, y metales para elementos florales y vegetales.
Se hizo conocido gracias a su obra el hotel Guimard, donde también había muebles que se integraban; eran obras sobrias que mantenían la asimetría, y también por las estaciones de Métro de París, lleno de elementos y decoraciones orgánicas típicas del nuevo estilo. Entre sus principales obras están: la casa Coilliot por su doble fachada, La Bluette por sus volúmenes, el Castel Henriette y el Castel d’Orgeval.
Sin embargo, finalmente pese a la originalidad de sus obras, no tuvieron mucho éxito pues eran refinadas y elevadas en costos, por lo que la gente que estaba con miedo por la Primera Guerra Mundial no podían pagarlo.


Alfons Mucha
Es para muchos, y me incluyo, el artista más destacado exponente del Art Nouveau, considerado pionero y precursor de la misma.
Es de origen checo, pero llega a París para trabajar como diseñador e ilustrador de libros y revistas, en vista de la intensa actividad gráfica que se desarrollaba en la época. Se hizo famoso al ser contratado por la actriz del momento, Sara Bernhardt; sin embargo, es con el cartel de Gismonda donde se le abren las puertas y adquiere contratos importantes, como del empresario Bronoff y una renovación de contrato con la actriz que lo contrato en su inicio. En este nuevo contrato, Mucha buscaba difundir la fama de la actriz, y trabajó para el teatro, donde se encargo de la escenografía y los vestuarios también.
Su actividad artística no solo se limito a carteles o dibujos, pues también hacía pinturas murales y muchas actividades decorativas, así como también, muebles, rejas, entre otros. Sirvió de inspiración para la joyería, en las alhajas de Georges Fouquet, que quedó impresionado con la ornamentación que Mucha les daba al entorno de la mujer; posteriormente, Mucha diseña los interiores de la joyería de Fouquet, para buscar nuevos compradores. Destaca la vidriería que hizo para la Catedral de San Vito, en Praga, admirada por los laicos hasta ahora. Mucha tuvo una fama internacional, y en muchos casos el Art Nouveau era sinónimo de Alfons Mucha, pues abarcó todos los patrones del movimiento en sus obras.
Se diferenció de muchos artistas pues quiso crear un mundo fantasioso: sus elementos fundamentales eran un simbolismo exótico con influencia oriental, que serviría para la decoración, llena de elementos de la naturaleza, como flores y elementos orgánicos; pero predominaban las mujeres, jóvenes hermosas, delgadas y de larga cabellera, llenas de una carga sensual, y para lograrla recurría a fotografías de modelos desnudas, y él les daba mayor dinamismo y realismo; así, la mujer se convirtió en la protagonista de todas sus obras, en vestidos voluminosos, refinados y cargados de adornos, caracterizados por tener incontables pliegues. Se destaca en el diseño gráfico por su originalidad, su composición, seguridad en la línea y su amplia gama de colores que inspiraría a muchos artistas hasta nuestros días.

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